Sinceramente, para ser un musical la resolución de las canciones es realmente vaga. Las transiciones a las mismas son muy abruptas e incongruentes. Se nota que el director no sabe dirigir el género, pues parece que las canciones aparecen porque así tiene que ser, sin avanzar nada en la trama o el desarrollo de personajes.
Este último también carece de existencia en el film, pues no se reconocen los objetivos de los personajes. Todo parece pasar porque así lo escribieron en el libro en su momento.
Se deja acabar porque la consecuencia de acciones es continua, pero por lo demás, y quitando alguna interpretación que otra, bastante bastante olvidable.