Juan Carlos Fresnadillo toma el relevo de Danny Boyle y entrega una secuela que, lejos de ser un simple “más de lo mismo”, apuesta por una visión aún más cruda, desesperanzadora y violenta del apocalipsis vírico. 28 semanas después arranca con un prólogo demoledor que ya justifica el precio de la entrada: tensión, culpa, supervivencia brutal… y una huida que deja cicatrices.
El ritmo no da tregua, y la dirección sabe alternar momentos de acción salvaje con un drama familiar que aporta más humanidad de lo esperado. No hay héroes, sólo víctimas de un sistema fallido y de sus propias decisiones. La cámara en mano y el montaje nervioso pueden marear a algunos, pero logran meternos de lleno en el caos.
El uso de la música, especialmente el tema de John Murphy, sigue siendo icónico y refuerza cada clímax con potencia. ¿Fallos? Algunos giros forzados y decisiones cuestionables, pero en general la película respira autenticidad y tensión real. Una dignísima secuela, más directa y brutal, que deja claro que el verdadero enemigo no es el virus… sino nosotros mismos.
He visto mil películas y series de zombies, desde la aclamada "The walking dead" hasta "Guerra mundial Z" "Train to Busan" y nunca, NUNCA, lo he pasado tan mal viendo una, y no lo digo como punto negativo.
Creo que cualquier obra audiovisual sobre zombies tiene el propósito de angustiar al espectador, sin embargo hasta día de hoy ninguna me había hecho sentir así de mal, ha cumplido el cometido que todas las películas de este tema debería querer cumplir, y solo por eso le doy un 10.
He tenido muy mal cuerpo durante las dos horas, he empatizado mucho con la situación y me ha parecido muy realista respecto a otras películas. Sin duda muy recomendada si te gusta este género, no obstante, no creo que vuelva a verla, no en un tiempo... lo he pasado mal.
``28 Dias despues´´ fue suficiente, esta es la demostracion de que segundas partes, son peores... Aunque siempre hay excepciones. Esta no es una de ellas.