Una gran película de cine negro, con una extraordinaria actuación de Lizabeth Scott, en su papel de mujer fatal, bien flanqueada por Burt Lancaster, en una lúcida actuación, y no tanto de Kirk Douglas, bastante decepcionante en mi opinión, por lo que la nota se queda en un notable bajo y no en un sobresaliente, como se merece la película bien dirigida por un desconocido para mí Byron Haskin.
El guión lo hemos visto en cientos de películas, dos íntimos amigos que se dedican a la vida criminal, que se prometen una sociedad eterna mientras uno se pasa quince años en prisión y el otro triunfa en los negocios, pero la codicia acaba con la amistad y con las promesas.
Vale mucho la pena, y además, la he visto en V.O.S que sin duda la mejora.
Notable, 7.