Dramón romántico con dos excelentes actores, con una química más que evidente y que los productores han explotado en varias ocasiones, y una cuidada ambientación . La segunda oportunidad que muchos buscamos y, desgraciadamente, pocos encontramos, tras salir de otros compromisos rotos por múltiples acontecimientos, buscando algo a lo que aferrarse para seguir viviendo, y amando. A ratos lacrimógena. A ratos, deliciosa.