La visualización de esta película me ha transportado a mi niñez, a aquéllos años 70 donde tras comer nos disponíamos a ver una serie de dibujos animados, ("Heidi", "Marco", y sí, "Mazinger Z") que estaban de moda antes de la peli de los sábados, donde toda la familia, como en un ritual, nos sentábamos ante la tele, generalmente de blanco y negro, para ver la emisión semanal, sin posibilidad de elección, y donde todos disfrutábamos habitualmente de lo que tenían a bien ofrecernos.
Y sí, me recuerda a aquellos dibujos japoneses, (eran todos japoneses) de Mazinger Z, donde los humanos conducían cual si de un vehículo se tratara a Mazinger, contra todos los robots y bichos alienígenas que le mandaban, y aquéllos "puños fuera" que eran espectaculares para acabar con el adversario de turno.
La película que nos ocupa, fuera de las cuestiones pseudocientíficas sobre agujeros de gusano, invasiones alienígenas y demás zarandajas, se reducen a acción y más acción donde unos robots tripulados por humanos se enfrentan a criaturas monstruosas que vienen del espacio exterior para colonizarnos, y más allá de la espectacularidad de los efectos digitalizados, las coreografías de peleas, los "puños fuera" y la espada capaz de cortar todo, sólo nos ofrecen acción dentro del espectáculo visual que nos ofrece Guillermo del Toro.
En el reparto, sobresale con fuerza propia Idris Elba, como actor reconocido tras su participación en la excelente "The Wire" y "Luther", entre otros, y una pléyade de secundarios bastante conocidos, con Santiago Segura a la cabeza.
Entretiene y mucho, que es de lo que se trata, como aquéllas películas de la televisión pública única que nos ofrecían sin posibilidad de cambiar de canal tras las series japonesas de dibujos animados.
Notable, 7.