Historia de amor poco convencional la que firma el gran Sydney Pollack entre una pareja que distorsiona tanto físicamente como mentalmente en sus anhelos y convicciones, a los que todo les separa menos el amor, pero un amor condicionado, siempre puesto en duda, siempre sometido a juicio.
No cabe duda de que a pesar de ser tan contrapuestos, la pareja de Streisand y Redford tiene química de cara al espectador, la tuvo en su día y la sigue manteniendo hoy. La activista judía y el deportista católico de la universidad se enamoraron por esa cosas que tiene el amor, un amor intemporal, que la convivencia no puede soportar.
Sin duda fue uno de los dramas románticos de mayor éxito, bien rodada, con inteligentes diálogos, con profundidad ideológica, con denuncia a la ley mordaza anticomunista en los tiempos de la guerra fría que tuvo su máximo exponente en la caza de brujas hollywoodiense, pero todo ese trasfondo social y político se queda en la maravillosa interpretación de "The Way We Were", la canción que obtuvo un Oscar así como la BSO.
Disfrutenla, es atemporal, como el amor. Notable, 8.