Me ha encantado, la verdad. No pensé que me fuera a cautivar de esta manera, pero tiene diferentes factores que te enganchan (o al menos en mi caso). Para empezar la puesta en escena, la cual sucede en Nueva Orleans; sinónimo de colores, música y vivacidad en estado puro. Han sabido transmitir de lleno toda esa multiculturalidad y valores familiares que representa la ciudad.

Luego está la música, ¡qué maravilla! Considero que tiene un muy buen repertorio, no tan sólo por el ritmo, si no también por las letras, con un mensaje claro pero a la vez enternecedor. También están los personajes, muy bien adaptados para mi gusto. Querría destacar en especial la relación de Tiana y Charlotte, puesto que es muy entrañable y se aleja mucho de los estereotipos que pueden inducir a tener sobre ellas si tenemos en cuenta la cronología y el lugar donde la trama sucede. En definitiva, ¡recomendada!