¿Cuánto dura una amistad? ¿Podemos llegar a aburrirnos de las personas con las que compartimos cada día de nuestra vida? No hay más que esto en la película que os ofrezco hoy: si cautivan los paisajes de la pequeña isla irlandesa en la que tiene lugar, sorprende la trama (o la ausencia de ella). De un día para otro, Colm se aburre de la amistad compartida con Pádraic. Durante casi dos horas, contemplaremos los intentos de este por volver a recobrar la amistad con aquel, que acaba por darle un ultimátum para que se aparte de él.
Es cierto que al principio se hace un poco pesado el ritmo de esta grabación: es una obra compleja. Sin embargo, conforme se van desarrollando las escenas, irán apareciendo diálogos muy bien tratados, y temas colaterales sin los que la película quedaría en mera pedantería.
El tonto del pueblo, que quizá no lo sea tanto; la sorprendente capacidad musical de hombres aparentemente primarios; la corrupción moral del policía y el sacerdote; la hermana que se ahoga en un pueblo en el que, ni es comprendida, ni puede comprender; la compañía que dan los animales cuando no se encuentra en los hombres nada agradable… Una obra compleja, sí, pero digna de ser contemplada sin prisa. No apta para ver con niños.
votos
¿Cuánto dura una amistad? ¿Podemos llegar a aburrirnos de las personas con las que compartimos cada día de nuestra vida? No hay más que esto en la película que os ofrezco hoy: si cautivan los paisajes de la pequeña isla irlandesa en la que tiene lugar, sorprende la trama (o la ausencia de ella). De un día para otro, Colm se aburre de la amistad compartida con Pádraic. Durante casi dos horas, contemplaremos los intentos de este por volver a recobrar la amistad con aquel, que acaba por darle un ultimátum para que se aparte de él.
Es cierto que al principio se hace un poco pesado el ritmo de esta grabación: es una obra compleja. Sin embargo, conforme se van desarrollando las escenas, irán apareciendo diálogos muy bien tratados, y temas colaterales sin los que la película quedaría en mera pedantería.
El tonto del pueblo, que quizá no lo sea tanto; la sorprendente capacidad musical de hombres aparentemente primarios; la corrupción moral del policía y el sacerdote; la hermana que se ahoga en un pueblo en el que, ni es comprendida, ni puede comprender; la compañía que dan los animales cuando no se encuentra en los hombres nada agradable… Una obra compleja, sí, pero digna de ser contemplada sin prisa. No apta para ver con niños.