Inusual comedia bélica dirigida por Henry Hathaway, donde un grupo de reservistas sin experiencia bélica ninguna y sin conocimientos específicos sobre los motores de vapor, encabezados por su capitán, un Gary Cooper que da la sensación, como no puede ser de otra forma, de que no se toma en serio lo que está haciendo, son encargados por la Marina de que realicen pruebas en una lancha sobre la fiabilidad o no de dichos motores.
Desbarajuste absoluto, alguna buena carcajada, y la oportunidad de ver a jóvenes actores como Charles Bronson, Lee Marvin o Jack Warden que iniciaban su carrera cinematográfica como secundarios prácticamente invisibles.
Sólo un aprobado, 5, siendo generoso.