Inicio interesante. Estética muy chula. El concepto está bien y da para juego.
De repente la película es una versión malísima de Lazytown, luego se vuelve Spy Kids rodada por un quinceañero, después llega el momento que más vergüenza ajena me ha generado en la història del cine y por último ves que aún le queda media hora a la película y te quieres pegar un tiro.
El final patético, a la altura de la peli y el tema del humor creo que es denunciable.
No la veáis si os queréis hacer un favor. Valiente pérdida de tiempo.