Película bélica de las de antes, con un excelente e inteligente guión, y una gran dirección de Brian G. Hutton, que posteriormente también dirigió otra cinta este género con "Los violentos de Kelly", plena de acción militar durante la primera hora de película donde Richard Burton capitanea a un grupo de comandos, donde destaca Clint Eastwood y la guapa Mary Ure para intentar rescatar de un castillo inaccesible de los Alpes a un general americano cautivo.
Una vez en el castillo, se mezcla la acción con una fantástica historia de espionaje que deja perplejo al espectador, que durante sus buenos diez minutos se decanta por un mar de dudas a la vista de lo escenificado.
Preciosa fotografía de unos Alpes nevados, una banda sonora al uso de la época, ensalzando las acciones violentas durante las dos horas y media de película, quizás en exceso, demasiadas explosiones, tiroteos y muertes, para llegar a una sorprendente resolución. Un sobresaliente, 9, y no le doy la matrícula de honor por incidir demasiado en la acción, cuando el suspense es realmente lo importante.
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Película bélica de las de antes, con un excelente e inteligente guión, y una gran dirección de Brian G. Hutton, que posteriormente también dirigió otra cinta este género con "Los violentos de Kelly", plena de acción militar durante la primera hora de película donde Richard Burton capitanea a un grupo de comandos, donde destaca Clint Eastwood y la guapa Mary Ure para intentar rescatar de un castillo inaccesible de los Alpes a un general americano cautivo.
Una vez en el castillo, se mezcla la acción con una fantástica historia de espionaje que deja perplejo al espectador, que durante sus buenos diez minutos se decanta por un mar de dudas a la vista de lo escenificado.
Preciosa fotografía de unos Alpes nevados, una banda sonora al uso de la época, ensalzando las acciones violentas durante las dos horas y media de película, quizás en exceso, demasiadas explosiones, tiroteos y muertes, para llegar a una sorprendente resolución. Un sobresaliente, 9, y no le doy la matrícula de honor por incidir demasiado en la acción, cuando el suspense es realmente lo importante.